En esta temporada de verano, deleita a tus sentidos con una receta sencilla y llena de sabor: los Rollitos de Calabacín. ¡Sencillo, delicioso y ligero! Prepara estos rollitos de calabacín y conquistarás a todos
Una opción deliciosa perfecta como aperitivo, apertura para una cena especial o incluso como un segundo plato ligero. Conquistarán a jóvenes y adultos con su irresistible bondad y la combinación armoniosa de calabacín, provolone y jamón.
Esta receta de rollitos de calabacín ofrece una opción veraniega fácil y deliciosa, perfecta para deleitar paladares tanto en aperitivos como en cenas especiales. También funciona como un plato ligero que complementa maravillosamente con rebanadas de pan fresco, conquistando tanto a adultos como a los más pequeños con su irresistible sabor.
Para obtener un resultado perfecto, es crucial cortar los calabacines en finas rodajas con la ayuda de una mandolina. Después de pasarlas por aceite de oliva virgen extra y sazonarlas con sal y pimienta, se sumergen en un empanado rico hecho con pan rallado, queso parmesano y perejil picado. Estas rodajas se rellenan con provolone y jamón cocido, luego se enrollan apretadamente, creando un bocado irresistible.
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Prepara estos rollitos de calabacín y conquistarás a todos con estos ingredientes
- 600 gramos de calabacines
- 200 gramos de jamón
- 200 gramos de lonchas de provolone
- Pan rallado (cantidad al gusto)
- 1 manojo de perejil fresco
- Queso parmesano rallado (cantidad al gusto)
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal y pimienta al gusto
Procedimiento
- Comienza lavando, pelando y cortando finas rodajas de calabacín con la ayuda de una mandolina.
- Prepara la mezcla de empanizado: en un bol, mezcla aceite de oliva virgen extra con una pizca de sal y pimienta. En otro bol, coloca pan rallado, perejil picado y queso parmesano rallado.
- Sumerge cada rodaja de calabacín primero en el aceite aromatizado y luego en la mezcla de pan rallado para que se adhiera uniformemente.
- Rellena las rodajas empanizadas con tiras de jamón cocido y añade generosas tiras de provolone.
- Enrolla las lonchas rellenas con precisión y colócalas en una bandeja de horno, asegurándote de que estén dispuestas verticalmente y cercanas entre sí para mantener su forma durante la cocción.
- Rocía un poco más de aceite de oliva sobre los rollitos y espolvorea con queso parmesano rallado.
- Hornea en un horno precalentado a 180 °C durante aproximadamente 25 minutos, o hasta que la superficie esté dorada y crujiente.
- Una vez cocidos, retira los rollitos del horno y transfiérelos a platos individuales.
Sirve estos deliciosos rollitos de calabacín mientras aún están calientes o tibios para disfrutar al máximo de su sabor y textura.
Tips
Las pequeñas delicias resultantes se colocan estratégicamente en una bandeja de horno para mantener su forma durante la cocción.
Al hornearlos, se logra un resultado final con una textura suculenta en el centro y una superficie crujiente y dorada.
Son excepcionales cuando se disfrutan recién salidos del horno, pero también se aprecian a temperatura ambiente. De hecho, permitir que reposen facilita que los sabores se fusionen aún más.
Al igual que con cualquier receta de rollitos, ya sean de carne, pescado o verduras, puedes personalizar el relleno según tus preferencias o la disponibilidad de ingredientes.
Experimenta con diferentes embutidos y quesos, agrega un componente cremoso como queso fresco para untar, o simplemente omite el jamón cocido para una variante vegetariana.
Estos rollitos de calabacín se conservan bien en el refrigerador durante dos días cuando se guardan en un recipiente hermético especial. Descubre cómo prepararlos siguiendo nuestro detallado procedimiento y consejos paso a paso. ¡También te animamos a probar las versiones fritas y los rollitos de calabacín con atún!
