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¡Se derrite en la boca! Avena + Calabaza! Saludable y deliciosa

Este horneado de avena con calabaza y frutas secas es una opción perfecta para quienes buscan algo nutritivo, fácil de hacer y naturalmente dulce sin necesidad de agregar azúcar.

Ideal para el desayuno o la merienda, aporta fibra, energía y un sabor delicioso.

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Su textura húmeda y esponjosa lo hace irresistible para grandes y chicos.

Ingredientes

  • 2 tazas (200 g) de avena arrollada
  • 1 cucharadita de polvo para hornear
  • 1/2 cucharadita de canela molida
  • 1 cucharadita de esencia de vainilla
  • Una pizca de sal
  • 1 taza (240 ml) de leche o yogur natural
  • 50 g de pasas de uva o ciruelas secas picadas
  • 50 g de duraznos secos o higos secos picados
  • 1/2 taza (50 g) de nueces picadas o almendras (opcional)
  • 100 g de calabaza rallada
  • 3 huevos
  • 3 cucharadas de aceite neutro (girasol o maíz)

Preparación

  1. En un bol grande, mezclar la avena, el polvo para hornear, la canela, la esencia de vainilla y la sal.
  2. Agregar la leche o el yogur y dejar reposar la mezcla durante 10 minutos para que la avena se hidrate.
  3. Mientras tanto, rallar la calabaza y picar las frutas secas.
  4. Incorporar a la mezcla de avena las frutas secas y la calabaza rallado.
  5. En otro recipiente, batir los huevos junto con el aceite neutro.
  6. Verter la mezcla de huevos en el bol con la avena y mezclar bien hasta integrar todos los ingredientes.
  7. Agregar las nueces o almendras si se desea un toque crocante.
  8. Verter la preparación en un molde engrasado de aproximadamente 18 cm de diámetro y distribuir uniformemente.
  9. Hornear en horno precalentado a 180°C durante 35-40 minutos o hasta que la superficie esté dorada y firme al tacto.
  10. Retirar del horno, dejar enfriar unos minutos y servir.

Consejos:

Opciones de endulzantes: Si se prefiere un toque más dulce, se puede agregar miel, azúcar mascabo o un puré de banana madura, que además aportará humedad a la preparación.

Frutas y frutos secos: Se pueden reemplazar las pasas de uva o ciruelas por dátiles, orejones de pera o manzana deshidratada. También se pueden usar semillas de girasol o lino en lugar de las nueces o almendras.

Variantes de lácteos: Para quienes prefieren evitar la leche de vaca, se puede reemplazar por bebida vegetal (avena, almendra o coco) o incluso por jugo de naranja para un sabor más fresco.

Condimentos extra: Se pueden incorporar especias como jengibre en polvo, nuez moscada o ralladura de limón o naranja para potenciar los sabores.

Textura y humedad: Si se busca una textura más esponjosa, se puede agregar un poco de polvo de hornear extra o un chorrito de jugo de limón para activar mejor la mezcla. Para una versión más húmeda, sumar media taza de puré de calabaza en lugar de rallarlo.

Este horneado es ideal para acompañar con yogur, miel o frutas frescas.

Una opción saludable, deliciosa y fácil de preparar para cualquier momento del día.

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