La milanesa de berenjena se convirtió en una alternativa muy popular por su sabor y versatilidad.
En formato sándwich, logra una combinación irresistible de crocante y fresco.

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Es ideal para un almuerzo rápido o una cena informal bien completa.
Ingredientes
Para las milanesas de berenjena:
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2 berenjenas medianas
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2 huevos
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1 taza de pan rallado
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½ taza de queso rallado (opcional)
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1 cucharadita de ajo en polvo
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1 cucharadita de perejil seco
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Sal y pimienta a gusto
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Aceite para freír o para cocinar al horno
Para el armado del sándwich:
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Pan tipo ciabatta, baguette o pan francés
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Mayonesa, mostaza u otro aderezo a elección
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Hojas de lechuga
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Rodajas de tomate
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Queso en fetas (opcional)
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Pepinillos o cebolla encurtida (opcional)
Preparación
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Lavá bien las berenjenas y cortalas en rodajas de aproximadamente medio centímetro de espesor. Si querés suavizar el sabor, espolvorealas con sal y dejalas reposar unos 20 minutos. Luego enjuagalas y secalas bien.
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En un bol, batí los huevos con sal y pimienta. En otro recipiente, mezclá el pan rallado con el queso rallado, el ajo en polvo y el perejil seco.
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Pasá cada rodaja de berenjena por el huevo batido y luego por el pan rallado, presionando levemente para que el empanado se adhiera bien.
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Para freírlas, calentá aceite y cociná las milanesas hasta que estén doradas y crocantes. Para hacerlas al horno, colocá las rodajas en una placa aceitada y cociná a 200 °C durante unos 20 minutos, dándolas vuelta a mitad de cocción.
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Cortá el pan al medio y tostalo apenas si lo preferís.
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Untá ambas mitades con el aderezo elegido.
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Colocá una o dos milanesas de berenjena, agregá la lechuga, el tomate y el queso. Sumá pepinillos o cebolla encurtida si te gusta.
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Cerrá el sándwich, presioná suavemente y serví de inmediato.
Tips y consejos:
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Elegí un pan firme para que no se humedezca con el relleno.
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Para una textura más crocante, repetí el empanado pasando nuevamente por huevo y pan rallado.
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Las berenjenas de piel fina pueden usarse sin pelar.
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Podés sumar otros ingredientes como palta, zanahoria rallada o salsa de tomate caliente.
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Si lo llevás, armá el sándwich al momento para que mantenga la textura.
Este sándwich de milanesa de berenjena es simple, contundente y lleno de sabor.
Una opción práctica que demuestra que lo vegetariano también puede ser bien potente y rendidor.