Si sos fanático de las papas fritas y te gusta acompañarlas con salsas sabrosas, esta receta de salsa cheddar casera es perfecta para darle un toque distinto y delicioso.
Esta preparación, popular en Estados Unidos y cada vez más común en locales de comida rápida, también puede hacerse fácilmente en casa con ingredientes simples y en pocos minutos.
Te recomendamos: Como hacer papas fritas como las de bolsa
Ingredientes
-
200 g de queso cheddar rallado
-
1 taza de leche (puede ser entera o descremada)
-
1 cucharada de manteca
-
1 cucharada de harina (opcional, si querés una salsa más espesa)
-
Sal y pimienta a gusto
-
Una pizca de mostaza (opcional)
Preparación
-
En una cacerola pequeña, derretí la manteca a fuego bajo, cuidando que no se queme.
-
Si querés que la salsa tenga una textura más espesa, agregá la cucharada de harina y cocinala junto con la manteca durante 1 o 2 minutos, sin dejar de revolver. Esto formará una base tipo roux que ayudará a darle cuerpo a la salsa.
-
De a poco, incorporá la leche mientras seguís mezclando con un batidor de alambre o una cuchara de madera. Es importante hacerlo en forma gradual para evitar que se formen grumos.
-
Mantené la cocción a fuego bajo y revolvé constantemente hasta que la mezcla comience a espesar ligeramente.
-
Agregá el queso cheddar rallado y seguí mezclando hasta que se funda por completo y la salsa tenga una consistencia lisa y cremosa.
-
Condimentá a gusto con sal y pimienta. Si querés, podés sumar una pizca de mostaza para darle un toque más intenso y equilibrar el sabor.
-
Serví la salsa caliente, directamente sobre las papas fritas o en un bowl para que cada uno se sirva a gusto.
Consejos:
-
Si te queda muy espesa, podés aligerarla agregando un poco más de leche tibia hasta alcanzar la textura deseada.
-
También podés usar la salsa para acompañar nachos, hamburguesas o como dip para snacks.
-
Si no tenés queso cheddar, podés probar con otro queso semiduro, pero el sabor y color característico solo lo da el cheddar.
-
Para darle un toque picante, podés agregar una pizca de ají molido o unas gotas de salsa picante.
Con esta receta simple y rápida, vas a transformar unas simples papas fritas en un plato irresistible y lleno de sabor.