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Cómo hacer esta deliciosa Tarta de crema de limón y merengue

Fresca, cremosa y con el equilibrio justo entre lo dulce y lo ácido, esta tarta de crema de limón con merengue es un clásico irresistible.

Su base crocante, el relleno suave y el merengue dorado hacen que cada bocado sea único.

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Una receta ideal para lucirse en cualquier ocasión.

Ingredientes

Para la base:

  • 200 g de galletitas de vainilla

  • 100 g de manteca derretida

Para la crema de limón:

  • 4 yemas

  • 120 g de azúcar

  • 40 g de maicena

  • 250 ml de agua

  • 150 ml de jugo de limón

  • Ralladura de 1 limón

  • 40 g de manteca

Para el merengue:

  • 3 claras

  • 150 g de azúcar

  • 50 ml de agua

Preparación

  1. Triturar las galletitas hasta obtener un polvo fino. Mezclar con la manteca derretida y cubrir la base de un molde para tarta, presionando bien. Llevar a la heladera por 30 minutos.

  2. Para la crema, batir las yemas con el azúcar y la maicena. Incorporar el agua caliente de a poco, mezclando bien.

  3. Llevar la mezcla a fuego bajo, agregar el jugo y la ralladura de limón, y cocinar hasta espesar. Retirar del fuego, añadir la manteca y revolver hasta integrar. Dejar enfriar.

  4. Volcar la crema de limón sobre la base fría y alisar la superficie.

  5. Para el merengue, colocar el azúcar y el agua en una olla pequeña y cocinar hasta alcanzar punto almíbar (118 °C).

  6. Mientras tanto, batir las claras a punto nieve. Incorporar el almíbar en forma de hilo sin dejar de batir, hasta obtener un merengue firme y brillante.

  7. Cubrir la tarta con el merengue, formando picos con una cuchara o manga. Dorar ligeramente con soplete o bajo el grill del horno.

Consejos:

  • Usá limones frescos y jugosos, ya que el sabor y la acidez marcan la diferencia en la crema. La ralladura es fundamental para potenciar el aroma.

  • La base también puede hacerse con masa quebrada: solo hay que precocinarla durante 15 minutos antes de añadir la crema.

  • Si querés un sabor más suave, podés mezclar jugo de limón con un poco de jugo de naranja.

  • Para que la crema no tenga grumos, es importante revolver constantemente durante la cocción. Si aparece alguno, podés colarla antes de enfriar.

  • El merengue debe batirse hasta estar firme y liso; si queda blando, se bajará al colocar sobre la tarta.

  • Podés preparar la base y la crema el día anterior y armar la tarta al momento de servir, agregando el merengue fresco.

  • Se conserva en la heladera hasta 2 días, siempre tapada para que no tome humedad ni olores.

  • Si querés darle un toque especial, espolvoreá ralladura extra de limón por encima antes de llevar a la mesa.

Una tarta elegante, fresca y tentadora que combina texturas y sabores a la perfección.

Una receta para sorprender y disfrutar en cada ocasión especial.

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