Si buscás un postre rápido, fácil y delicioso, esta receta es ideal para vos.
Con un toque cítrico y una textura esponjosa, estos rollitos de naranja se preparan en minutos y son perfectos para acompañar un café o té.
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Lo mejor es que no necesitás ingredientes complicados ni largas horas en la cocina.
¡Seguí el paso a paso y sorprendé a todos con un bocado irresistible!
Ingredientes
- 1 huevo
- 2 cucharadas de azúcar
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 1 pizca de sal
- Ralladura de 1 naranja
- 60 ml de jugo de naranja natural
- 125 g de yogur griego o crema agria
- 280 g de harina
- 6 g de polvo de hornear (1/2 sobre)
- Azúcar y azúcar avainillado para espolvorear
Preparación
- Precalentar el horno a 180°C para asegurar una cocción uniforme.
- En un bol, batir el huevo junto con el azúcar, el aceite, la sal, la ralladura y el jugo de naranja hasta obtener una mezcla homogénea.
- Agregar el yogur o la crema agria y mezclar bien para lograr una textura cremosa.
- Tamizar la harina junto con el polvo de hornear e incorporarlos gradualmente a la mezcla húmeda, mezclando hasta obtener una masa suave y uniforme.
- Sobre una superficie enharinada, extender la masa con un rodillo formando un rectángulo.
- Espolvorear con azúcar y azúcar avainillado para aportar un extra de dulzura y aroma.
- Enrollar la masa desde uno de los lados largos formando un rollo firme.
- Cortar en rodajas de aproximadamente 1,5 cm de grosor asegurando que sean de tamaño uniforme.
- Disponer las rodajas en una bandeja con papel para hornear, dejando espacio entre ellas.
- Hornear durante 15-20 minutos o hasta que adquieran un tono dorado y estén bien cocidas.
- Retirar del horno y dejar enfriar antes de servir.
Consejos para un mejor resultado
- Podés sustituir la naranja por limón o lima para darle otro toque cítrico.
- Asegurate de que todos los ingredientes estén a temperatura ambiente para una mejor integración.
- Para un extra de sabor, podés espolvorear con canela antes de hornear.
Este postre es ideal para acompañar con café, té o una taza de leche.
Su textura esponjosa y su sabor fresco lo convierten en una opción perfecta para cualquier momento