Categorías
Postres, pastelería y cosas dulces

Cómo hacer Budín de limón y ricotta ¡Un clásico italiano fácil!

Aromático, húmedo y con miga tierna, este budín trae el espíritu de las tortas italianas de ricotta pero con ingredientes fáciles de conseguir.

Va perfecto para el mate, el café o una merienda de domingo. Acá tenés una versión clara, equilibrada y lista para salir bien a la primera.

Te recomendamos: Cómo hacer Tiramisú auténtico con un toque casero

Ingredientes

  • 250 g de ricotta bien escurrida

  • 120 g de manteca pomada (o 90 ml de aceite neutro)

  • 200 g de azúcar

  • 3 huevos grandes

  • Ralladura fina de 2 limones + 40–50 ml de jugo

  • 250 g de harina 0000

  • 10 g de polvo de hornear (1 cda colmada)

  • 1 pizca de sal

  • 60 ml de leche (solo si la ricotta está muy seca)

  • 1 cdita de esencia de vainilla (opcional)

Glaseado opcional: 150 g de azúcar impalpable + 2–3 cdas de jugo de limón.

Preparación

  1. Encendé el horno a 170 °C. Enmantecá y enhariná una budinera de 24–26 cm o forrá con papel manteca.

  2. Colá la ricotta 15 minutos si viene húmeda. Esto evita que el budín se apelmace.

  3. Batí manteca y azúcar 3–4 minutos hasta cremar. Si usás aceite, mezclá con batidor de mano hasta integrar.

  4. Agregá los huevos de a uno, batiendo tras cada incorporación. Sumá la vainilla, la ralladura y el jugo de limón.

  5. Tamizá harina, polvo de hornear y sal. Incorporá en dos tandas, alternando con la leche solo si la mezcla está espesa; buscá una preparación lisa y algo densa, sin sobrebatir.

  6. Integra la ricotta con espátula, rompiendo grumos grandes pero sin deshacerla por completo: algunos puntitos le dan buena textura.

  7. Volcá en el molde, alisá la superficie y, si querés un “crack” prolijo, pasá un cuchillo apenas enmantecado por el centro a lo largo.

  8. Horneá 45–55 minutos, hasta que al pinchar salga seco. Si se dora rápido, cubrí flojo con aluminio al minuto 35.

  9. Dejá enfriar 10 minutos en el molde; desmoldá y pasá a rejilla hasta que esté a temperatura ambiente.

  10. Para el glaseado, mezclá azúcar impalpable y jugo de a poco hasta lograr una cinta espesa pero fluida; bañá el budín y dejá secar 20 minutos.

Consejos:

  • Si tus limones son chicos, sumá una tercera ralladura para perfumar más sin agregar jugo extra.

  • La ricotta define la miga: elegí una firme; si es casera o muy húmeda, escurrila en gasa.

  • Con aceite queda más liviano y húmedo; con manteca, más sabor lácteo.

  • Probá un “blend cítrico”: mitad limón, mitad naranja.

  • Para freezar: envolvé en film (sin glaseado) y guardá hasta 2 meses; descongelá en heladera.

  • Queda genial con arándanos: incorporá 120 g enharinados al final.

  • Si te gusta más alto, usá molde angosto y controlá el tiempo (puede sumar 5–8 minutos).

Listo: un budín fragante, parejo y con ese toque de ricotta que lo hace distinto.

Ideal para cortar rebanadas generosas y disfrutarlo solo o con un glaseado bien cítrico.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *