Este budín de frutillas es ideal para aprovechar la fruta de estación y llenar la cocina de aroma dulce y fresco.
Su textura es húmeda, liviana y con trocitos de frutilla que se funden en cada bocado.
Te recomendamos: Cómo hacer Pastel Helado de Coco y Galletitas ¡Fácil, cremoso y sin horno!
Perfecto para acompañar con un mate, café o una taza de té, es una receta simple y deliciosa que siempre sale bien.
Ingredientes
-
2 tazas de harina leudante
-
1 taza de azúcar
-
3 huevos
-
½ taza de aceite neutro
-
½ taza de leche
-
1 cucharadita de esencia de vainilla
-
2 tazas de frutillas frescas picadas
-
Ralladura de 1 limón (opcional)
-
Azúcar impalpable para espolvorear
Preparación
-
Preparar las frutillas: Lavá y secá bien las frutillas. Cortalas en cubos pequeños y reservalas. Si son muy jugosas, podés pasarlas por una cucharada de harina para que no se vayan al fondo del budín al hornearlo.
-
Batir los ingredientes húmedos: En un bowl grande, batí los huevos con el azúcar hasta que la mezcla quede espumosa y clara. Agregá el aceite, la leche y la esencia de vainilla. Mezclá bien hasta integrar todo.
-
Incorporar los secos: Sumá la harina leudante tamizada y la ralladura de limón. Mezclá con movimientos envolventes hasta obtener una masa suave y homogénea, sin batir de más.
-
Agregar las frutillas: Incorporá las frutillas picadas a la mezcla y mezclá apenas para distribuirlas de manera uniforme.
-
Hornear: Verté la preparación en un molde de budín previamente enmantecado y enharinado. Llevá al horno precalentado a 170 °C durante 40 a 45 minutos, o hasta que al insertar un palillo salga limpio.
-
Enfriar y decorar: Dejá enfriar sobre una rejilla. Una vez tibio, espolvoreá con azúcar impalpable o decorá con frutillas frescas por encima para darle un toque extra de color.
Consejos:
-
Podés reemplazar parte del aceite por yogur natural para un budín aún más húmedo.
-
Si querés intensificar el sabor, agregá unas gotas de extracto de frutilla o esencia natural.
-
Conservá el budín tapado o en un recipiente hermético para mantener su textura por varios días.
-
Si las frutillas están muy maduras, reducí un poco la cantidad de azúcar para equilibrar el dulzor.
-
Podés usar harina común y agregar una cucharadita de polvo de hornear si no tenés harina leudante.
-
Si querés un toque crocante, espolvoreá azúcar gruesa por encima antes de hornear.
-
Añadí trocitos de chocolate blanco o chips para combinar sabores y lograr un contraste delicioso.
-
También podés usar frutillas congeladas, pero agregalas directamente a la masa sin descongelar.
-
Si lo hacés en formato de muffins, el tiempo de cocción será de unos 20 minutos.
-
Para un acabado más vistoso, decorá con un glaseado simple de azúcar impalpable y jugo de limón.
Este budín húmedo de frutillas es un clásico irresistible: tierno, aromático y lleno de sabor.
Perfecto para compartir en familia o disfrutar a cualquier hora del día, siempre conquista con su textura y su frescura natural.