Estas salsas son el alma de la comida mexicana: frescas, coloridas y llenas de sabor.
Son ideales para acompañar tacos, carnes, nachos o simplemente disfrutar con pan o galletas saladas.

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En esta guía vas a aprender a preparar cuatro versiones irresistibles: guacamole, pico de gallo, salsa verde y una cremosa salsa de aguacate.
Guacamole mexicano tradicional
Ingredientes
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3 aguacates maduros (paltas, ni muy blandos ni duros)
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1 tomate rojo (jitomate) mediano, picado en cubitos pequeños
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¼ de cebolla blanca picada fina
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1 o 2 chiles serranos o jalapeños (o cualquier ají picante, según tu gusto por el picante)
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3 cucharadas de cilantro fresco picado
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Jugo de 1 limón
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Sal al gusto
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(Opcional) una pizca de ajo picado o en polvo
Preparación
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Picá finamente la cebolla, el chile y el cilantro. Cortá el tomate en cubos pequeños, retirando las semillas si querés una textura menos líquida.
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Cortá los aguacates, retirales la semilla y sacá la pulpa con una cuchara. Colocala en un bowl y aplastala con un tenedor, dejando una textura rústica.
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Agregá la cebolla, el chile, el tomate y el cilantro. Mezclá suavemente para integrar.
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Incorporá el jugo de limón y la sal, mezclando apenas.
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Serví en un molcajete o bowl y decorá con hojas de cilantro o rodajas finas de chile.
Tips y consejos:
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Para evitar que se oxide, dejá el carozo dentro del guacamole y cubrilo con film en contacto.
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Si preferís una versión más suave, agregá una cucharada de yogur natural.
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No lo licués: el secreto del guacamole está en su textura.
Pico de gallo mexicano tradicional
Ingredientes
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3 tomates rojos (jitomates) maduros pero firmes
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½ cebolla blanca picada
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1 o 2 chiles serranos o jalapeños frescos
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¼ taza de cilantro fresco picado
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Jugo de 1 limón
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Sal al gusto
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(Opcional) una pizca de pimienta negra o un chorrito de aceite de oliva
Preparación
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Lavá bien los tomates, el cilantro y los chiles.
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Retirá las semillas de los tomates si querés una mezcla menos jugosa.
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Picá los tomates, la cebolla y los chiles en cubos pequeños. Sumá el cilantro picado.
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Colocá todo en un bowl, añadí el jugo de limón y la sal, y mezclá con suavidad.
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Dejá reposar unos minutos para que los sabores se integren y serví.
Tips y consejos:
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Podés usar chile verde o ají picante local si no conseguís jalapeños.
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Servilo con nachos, carnes, pollo o encima de tacos.
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Agregar unas gotas de vinagre blanco realza el sabor.
Salsa verde en molcajete (receta tradicional mexicana)
Ingredientes
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8 tomatillos verdes (pelados y lavados)
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2 o 3 chiles serranos o chiles de árbol verdes (según tu preferencia)
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1 diente de ajo
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¼ de cebolla blanca
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5 ramas de cilantro fresco
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Sal gruesa al gusto
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(Opcional) unas gotas de jugo de limón o un poco de agua caliente si queda muy espesa
Preparación
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Asá los tomatillos, los chiles, el ajo y la cebolla en una sartén sin aceite durante 8 a 10 minutos, girándolos hasta que estén dorados y con partes ennegrecidas.
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En un molcajete (o mortero), molé primero el ajo con sal hasta obtener una pasta.
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Añadí los chiles y molé bien. Incorporá la cebolla y seguí moliendo.
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Sumá los tomatillos uno por uno, aplastándolos hasta conseguir una salsa rústica.
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Agregá el cilantro picado y mezclá suavemente. Ajustá con sal y, si hace falta, unas gotas de limón.
Tips y consejos:
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Si no tenés molcajete, podés usar una procesadora en modo pulsado para conservar la textura.
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Esta salsa combina de maravilla con carne asada, tacos o chicharrón.
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Guardala en la heladera hasta 3 días en un frasco tapado.
Salsa cremosa de aguacate
Ingredientes
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2 aguacates maduros (palta)
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½ taza de crema agria o yogur natural
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¼ taza de agua (ajustá según la textura)
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1 diente de ajo pequeño
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¼ de cebolla blanca
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1 o 2 chiles serranos o jalapeños (a gusto)
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Jugo de 1 limón
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Unas hojas de cilantro fresco
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Sal al gusto
Preparación
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Lavá los chiles y el cilantro.
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Pelá los aguacates, retirales la semilla y cortá la pulpa.
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Colocá en la licuadora los aguacates, la crema o yogur, los chiles, el ajo, la cebolla, el cilantro, el jugo de limón y la sal.
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Añadí el agua de a poco mientras licuás hasta lograr una textura cremosa y homogénea.
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Probá y ajustá el punto de sal o limón.
Tips y consejos:
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Si la querés más ligera, reemplazá la crema por agua tibia o caldo vegetal.
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Para una versión más intensa, asá el ajo y los chiles antes de licuar.
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Se conserva en heladera hasta 2 días, cubierta con film en contacto directo.
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Ideal para tacos, papas fritas, pollo o como dip fresco.
Estas cuatro salsas aportan frescura y sabor a cualquier comida.
Prepararlas en casa es simple y te asegura un resultado natural, sin conservantes y con el auténtico toque mexicano que realza cualquier plato.