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Preparación de Panes

Cómo hacer Tostado de chipa para la merienda

Si sos fan del sabor único del chipa y querés darle una vuelta de tuerca a la clásica receta, este tostado de chipa relleno de jamón y queso es la opción perfecta.

Con una textura crocante por fuera y un interior suave y bien derretido, se convierte en una merienda distinta o una cena rápida que todos van a disfrutar.

Te recomendamos: 1 litro de leche, 1 yogur y medio limón son suficientes para preparar ¡El mejor queso casero!

Ingredientes

  • 250 gramos de fécula de mandioca

  • 30 gramos de manteca blanda (pomada)

  • 1 huevo

  • 1 cucharada de polvo de hornear

  • Sal a gusto

  • 100 gramos de queso semiduro rallado

  • 1/8 de taza de leche

  • 50 gramos de jamón

  • 50 gramos de queso cremoso

Preparación

  1. En un bol grande, mezclá la fécula de mandioca con la manteca pomada. Agregá el queso semiduro rallado, el huevo, el polvo de hornear y una pizca de sal. Sumá la leche y trabajá la preparación hasta formar una masa homogénea.

  2. Colocá la masa sobre papel manteca o directamente sobre la mesada. Estirala con un palo de amasar hasta conseguir un espesor parejo, de aproximadamente 1 centímetro.

  3. Cortá la masa en rectángulos o círculos, según prefieras, teniendo en cuenta el tamaño final que querés para cada tostado.

  4. En la mitad de los rectángulos, colocá una porción de jamón y una de queso cremoso. Luego, cubrí cada uno con otro trozo de masa y presioná bien los bordes con los dedos para que no se abra durante la cocción.

  5. Precalentá una sandwichera o, si no tenés, usá el horno a temperatura media (alrededor de 180°C).

  6. Cociná los tostados de chipa hasta que estén dorados por fuera y el queso completamente derretido por dentro. En la sandwichera suelen estar listos en unos 10 minutos, mientras que en el horno pueden tardar un poco más.

Consejos:

  • Si querés, podés darle un toque extra de sabor agregando orégano o pimienta a la masa.

  • También podés variar el relleno y usar queso azul, mozzarella o incluso agregar rodajas de tomate.

  • Estos tostados son ideales para comer calientes, pero si te sobran, podés guardarlos en la heladera y recalentarlos en horno o sandwichera para que recuperen su textura.

  • Si no tenés fécula de mandioca, podés intentar con almidón de maíz, aunque el resultado será un poco distinto en sabor y textura.

Con esta receta simple y rápida, vas a disfrutar de un tostado de chipa original, sabroso y perfecto para compartir en cualquier momento del día.

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