Cómo hacer estas 2 recetas de Tortas frias ¡Sin horno!

Si querés algo dulce, fácil y sin encender el horno, estas dos opciones son ideales.

Ambas tortas tienen una textura cremosa y un sabor irresistible, perfectas para compartir en familia o sorprender con un postre fresco y casero.

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Ingredientes

Para la torta Oreo (sin horno):

Base:

• 1 paquete de galletitas Oreo (trituradas)

• 60 g de manteca derretida

Relleno:

• 300 g de queso crema

• 200 ml de crema de leche

• 4 cucharadas de azúcar

• 1 cucharadita de esencia de vainilla

• Trozos de Oreo a gusto

Para el cheesecake sin gelatina:

Base:

• 200 g de galletitas dulces

• 100 g de manteca derretida

Relleno:

• 300 g de queso crema

• 200 ml de crema de leche

• ½ taza de azúcar

• 1 cucharadita de esencia de vainilla

Cobertura:

• Mermelada de frutilla o frutos rojos a gusto

Preparación

Torta Oreo (sin horno):

1. Triturá las Oreo hasta que queden como una arenita y mezclalas con la manteca derretida.

2. Colocá la mezcla en la base de un molde desmontable, presionando bien para que quede compacta. Llevá a la heladera mientras preparás el relleno.

3. En un bol, batí el queso crema con la crema de leche, el azúcar y la vainilla hasta que quede una crema firme y homogénea.

4. Incorporá trozos de Oreo a gusto y mezclá con una espátula.

5. Verté la crema sobre la base, emparejá la superficie y llevá a la heladera por al menos 4 horas hasta que tome consistencia.

Cheesecake sin gelatina:

1. Triturá las galletitas dulces y mezclalas con la manteca derretida.

2. Forrá la base de un molde desmontable con esa mezcla y presioná bien. Reservá en la heladera.

3. En otro bol, batí el queso crema con la crema de leche, el azúcar y la vainilla hasta obtener una mezcla suave y sin grumos.

4. Verté el relleno sobre la base, alisá con una espátula y refrigerá por un mínimo de 6 horas.

5. Antes de servir, cubrí con una capa generosa de mermelada de frutilla o frutos rojos.

Consejos:

• Para un mejor resultado, usá queso crema firme y crema de leche bien fría. Esto ayuda a que la mezcla mantenga la consistencia sin necesidad de gelatina.

• En el caso de la torta Oreo, podés reservar algunas galletitas para decorar por arriba justo antes de servir.

• Ambas tortas se pueden hacer con un día de anticipación, lo que mejora el sabor y asegura una textura más firme.

• Si no tenés molde desmontable, forrá uno común con film para facilitar el desmolde.

• La cobertura del cheesecake podés variarla según la estación: arándanos, moras o dulce de leche también combinan perfecto.

• Para un toque extra, agregá ralladura de limón o naranja a la mezcla del cheesecake.

Dos opciones simples, cremosas y sin horno que vas a querer repetir más de una vez.

Frescas, fáciles y siempre bien recibidas.