¡La mini pizza casera es un aperitivo rápido y delicioso para toda la familia!

Las mini pizzas caseras son una opción práctica, divertida y muy sabrosa para compartir.

Su tamaño individual las convierte en el aperitivo perfecto para reuniones, meriendas o simplemente para sorprender a la familia con algo fácil de preparar.

Te recomendamos: Todo el mundo se enamoró de él después de probarlo ¡Un plato sencillo y delicioso!

Lo mejor es que se pueden personalizar con los ingredientes que más te gusten.

Ingredientes

• 300 g de harina de trigo

• 150 ml de leche tibia

• 1 cucharada de azúcar

• 1 cucharadita de sal

• 7 g de levadura seca (o 15 g de levadura fresca)

• 2 cucharadas de aceite de oliva

• 150 g de salsa de tomate para pizza

• 150 g de jamón en cubitos

• 100 g de salame en rodajas finas

• 200 g de queso mozzarella rallado

• Orégano seco a gusto

Preparación

1. En un bol, mezclar la leche tibia con la levadura y el azúcar. Dejar reposar 10 minutos hasta que espume.

2. Incorporar la harina, la sal y el aceite de oliva. Amasar hasta obtener una masa suave y elástica. Cubrir y dejar leudar 1 hora o hasta que duplique su tamaño.

3. Dividir la masa en porciones pequeñas y formar bollitos. Aplastarlos ligeramente para darles forma de base de mini pizza.

4. Colocar las bases en una bandeja con papel manteca y dejar reposar 10 minutos más.

5. Extender una capa de salsa de tomate sobre cada base, añadir cubitos de jamón, rodajas de salame y cubrir con abundante queso rallado.

6. Espolvorear con orégano y llevar al horno precalentado a 200 °C durante 15 a 20 minutos, hasta que estén doradas y el queso fundido.

7. Retirar del horno, dejar entibiar unos minutos y servir.

Consejos:

• Podés preparar la masa con anticipación y guardarla en la heladera bien tapada hasta el día siguiente.

• Si buscás una versión más rápida, también podés usar pan árabe o tortillas como base, aunque la masa casera siempre da un resultado más tierno y sabroso.

• Para variar los sabores, probá con champiñones, aceitunas, morrones asados o pollo desmenuzado como topping.

• Estas mini pizzas también se pueden congelar ya horneadas. Solo necesitás calentarlas en horno fuerte unos minutos antes de servirlas.

• Si te gustan más crujientes, colocá la bandeja directamente sobre la base del horno durante los últimos 5 minutos de cocción.

• Son una excelente opción para cumpleaños, picadas o incluso para llevar como vianda, ya que se mantienen ricas incluso frías.

Con esta receta fácil, vas a tener mini pizzas caseras irresistibles, ideales para cualquier momento del día y con la ventaja de que cada uno puede personalizar la suya a gusto.