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Trucos del Hogar

El gas me duró 6 meses cuando aprendí este truco que me mostró un gasista

¿Sentís que el gas envasado o natural te rinde cada vez menos?

A muchos les pasa lo mismo, pero lo que pocos saben es que el problema no siempre está en el proveedor o en el uso, sino en las hornallas.

Te recomendamos: Cómo hacer un limpiador de horno casero

Un gasista me explicó que cuando los quemadores están sucios o tapados, el consumo de gas se dispara sin que te des cuenta.

Lo probé y me sorprendió: después de aplicar este método, el gas me duró más del doble.

1. Lo que pasa cuando las hornallas están sucias

Cuando cocinamos, es normal que caigan restos de comida, grasa, aceite o incluso líquidos dulces que con el calor se van quemando.

Esa suciedad va tapando las salidas del gas y modificando la llama.

Si en vez de azul la ves más anaranjada o amarilla, significa que la combustión no es eficiente y estás gastando gas de más.

Esa llama débil no cocina bien, tarda más, y hace que el gas se consuma más rápido.

2. Qué necesitás para limpiar correctamente los quemadores

Este truco es barato, fácil y se hace con cosas que seguro tenés en casa. Tomá nota de los materiales:

  • Pasta dental blanca (no gel)

  • 2 cucharadas de sal

  • 1 cucharada de bicarbonato de sodio

  • 1 cucharada de detergente líquido

  • Agua caliente

  • Un recipiente amplio

  • Cepillo o esponja

3. Paso a paso para dejar los quemadores impecables

  1. Asegurate de que las hornallas estén frías. Retirá todas las piezas con cuidado: tapas, difusores y cabezales.

  2. Aplicá pasta dental sobre las partes metálicas. Con una esponja o un cepillo, frotá bien para que penetre en la grasa pegada. Esto afloja los restos sin dañar el material.

  3. En un bol grande, prepará la solución: agua caliente, sal, bicarbonato y detergente. Mezclá y sumergí todas las piezas.

  4. Dejalas en remojo al menos 2 horas. Esto va a despegar toda la mugre incrustada.

  5. Pasado ese tiempo, frotá las piezas nuevamente si quedó alguna parte con suciedad.

  6. Enjuagá con agua limpia y secá bien cada parte antes de volver a armar.

4. ¿Cómo sabés si funcionó?

Una vez que armás todo de nuevo, prendé la hornalla.

Si la llama sale azul y fuerte, lograste que la combustión sea eficiente.

Eso significa que el gas se está quemando de forma pareja y rendidora.

Si sigue saliendo naranja, dejala prendida unos minutos para que se estabilice.

En caso de que no mejore, puede ser necesario revisar la boquilla o consultar a un gasista.

Tips y consejos:

  • Hacelo una vez por mes para mantener siempre el funcionamiento óptimo.

  • Evitá que caigan líquidos sobre los quemadores. Si pasa, limpiá en el momento.

  • Nunca uses productos abrasivos ni virulana, porque pueden dañar las piezas metálicas.

  • Si la cocina tiene muchos años y sigue fallando, pedí que un profesional revise los inyectores y válvulas.

  • Este método también sirve para cocinas industriales o garrafas portátiles.

Este truco simple puede ayudarte a ahorrar una buena plata por mes, sobre todo si usás gas envasado. Además, cocinás más rápido y con mejor rendimiento.

Probalo y compartilo con alguien que también esté buscando ahorrar. ¡Funciona de verdad!

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