La masa de sal es una opción sencilla, económica y muy versátil para crear adornos caseros con buenos resultados.
Su textura es similar a una plastilina firme que se endurece al secarse, lo que permite hacer figuras decorativas y piezas personalizadas.

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Es ideal para proyectos navideños, manualidades con chicos o artesanías para regalar.
Qué necesitás
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2 tazas de harina de trigo común
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1 taza de sal fina
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1 taza de agua (aproximada, según la humedad del ambiente)
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Recipiente amplio para mezclar
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Rodillo y cortantes (opcional)
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Pinturas acrílicas o témperas
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Barniz transparente o pegamento blanco diluido
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Palillo para hacer agujeros
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Bandeja o superficie plana para secado
Paso a paso
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Colocá la harina y la sal dentro de un recipiente amplio. Mezclá bien para integrar ambos ingredientes y obtener una base uniforme que facilite el amasado posterior. Cuanto mejor se combinen desde el inicio, más pareja quedará la textura final de la masa.
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Incorporá el agua de a poco mientras empezás a amasar con las manos. Es importante no volcar toda el agua de una sola vez porque puede variar la cantidad necesaria según el clima. Procurá que la mezcla vaya tomando cuerpo sin quedar pegajosa. Si notás que falta líquido, añadí apenas un poco más.
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Amasá la preparación durante varios minutos hasta que esté suave, lisa y fácil de manipular. El objetivo es lograr una textura similar a la plastilina: flexible, compacta y sin restos secos. Si queda muy blanda, agregá una cucharada de harina; si está dura, humedecé tus manos y seguí amasando.
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Estirá la masa sobre una superficie limpia usando un rodillo o tus manos. Dejala con un espesor parejo para que todas las figuras se sequen de forma uniforme. Usá cortantes navideños, tapas o moldes caseros para dar forma a las piezas. También podés modelar figuras a mano si buscás diseños más personalizados.
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Realizá un pequeño agujero con un palillo en cada figura que quieras colgar. Este paso debe hacerse antes del secado porque luego la masa se endurece y podría quebrarse. Es ideal para fabricar adornos para el árbol, etiquetas de regalo o colgantes decorativos.
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Dejá secar las piezas al aire durante 24 a 48 horas, dándolas vuelta cada tanto para que se endurezcan por completo. Si querés acelerar el proceso, podés usar un horno a temperatura muy baja. Mantené entre 100 y 120 °C y horneá entre una y dos horas, revisando periódicamente para evitar que se doren.
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Una vez que estén completamente duras, comenzá a decorarlas con pinturas acrílicas, témperas o marcadores permanentes. Podés aplicar capas finas de color, hacer diseños navideños, agregar detalles brillantes o jugar con texturas. Dejá secar bien antes de pasar al sellado.
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Aplicá una capa de barniz transparente o de pegamento blanco diluido para proteger las piezas. Este paso mejora la durabilidad, realza los colores y evita que la humedad afecte la superficie. Dejala secar por completo antes de usar o colgar tus figuras.
Tips y consejos:
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Si querés un acabado más fino, cerní la harina y usá sal bien molida.
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Podés colorear la masa desde el inicio agregando témpera o colorante alimentario.
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Guardá la masa que no uses en una bolsa hermética en la heladera para mantenerla en buen estado unos días.
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Para evitar que las piezas se deformen durante el secado, apoyalas siempre sobre una superficie firme.
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Si querés lograr figuras más resistentes, asegurate de que el grosor sea parejo en toda la pieza.
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El horno debe usarse a baja temperatura para que no aparezcan burbujas ni se quiebren los bordes.
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Es una actividad segura para chicos, pero recordales que no es comestible por el alto contenido de sal.
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Podés agregar brillantina después de pintar para dar un efecto más festivo.
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Si el clima es muy húmedo, el secado al aire puede tardar más; en ese caso, el horno ayuda bastante.
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Para piezas que vayan a manipularse mucho, aplicá dos capas de barniz para mayor protección.
La masa de sal es una técnica accesible y muy creativa que permite hacer adornos personalizados para regalar o decorar cualquier ambiente.
Con pocos materiales y un poco de imaginación, podés lograr piezas únicas y duraderas.