Estas albóndigas de espinaca son ideales para quienes buscan una alternativa sabrosa, sin carne y muy fácil de preparar.
Son crocantes por fuera, suaves por dentro, y tienen un sabor que sorprende a todos.
Te recomendamos: Cómo hacer Pancitos de Queso ¡Super Suaves, Rápidos y Deliciosos!
Perfectas como plato principal, entrada o para picar algo distinto y casero.
Ingredientes
-
400 a 500 g de papas hervidas y peladas
-
200 g de espinaca cocida y bien escurrida
-
1 diente de ajo
-
200 ml del agua de cocción de las papas
-
40 g de queso rallado tipo parmesano
-
1 huevo
-
Sal, pimienta y nuez moscada a gusto
-
90 g de pan rallado (más extra si querés rebozar)
-
150 g de muzzarella en cubos
-
Aceite de oliva cantidad necesaria
Preparación
-
Herví las papas con cáscara hasta que estén bien tiernas. Pelalas en caliente y hacé un puré liso. Reservá 200 ml del agua de cocción.
-
Picá el ajo y saltealo con un chorrito de aceite en una sartén. Sumá el agua de cocción y dejá reducir unos minutos.
-
Incorporá la espinaca bien escurrida y picada. Cociná un minuto, retirando el ajo para que no invada el sabor.
-
En un bol grande, mezclá el puré de papa con la espinaca, el queso rallado, el huevo, las especias y el pan rallado. Te tiene que quedar una masa fácil de moldear.
-
Formá bolitas medianas. En el centro de cada una, poné un cubito de muzzarella y cerralas bien.
-
Si querés más crocancia, pasalas por pan rallado nuevamente.
-
Colocalas en una fuente con aceite o papel manteca y llevá al horno precalentado a 180 °C por 25 a 30 minutos, hasta que estén doraditas.
Sugerencias para servir
-
Servilas calientes con salsa de tomate casera o una crema de yogur con limón y hierbas.
-
Son ideales para acompañar arroz, puré o una ensalada fresca.
Consejos de cocina
-
Si la mezcla queda muy húmeda, agregá un poco más de pan rallado o harina de garbanzos.
-
Podés cocinarlas en sartén con un poco de aceite o en freidora de aire.
-
Reemplazá la espinaca por kale, brócoli o acelga, siempre bien escurridos.
-
Agregá una cucharada de mostaza o queso crema a la mezcla para darle otro sabor.
-
Se conservan en heladera por 3 a 4 días o en el freezer por hasta 3 meses.
Una receta sencilla, sin carne y con mucho sabor. Estas albóndigas son una gran opción para incorporar vegetales sin resignar lo rico.
Probá hacerlas y vas a ver cómo se vuelven infaltables en tu cocina.