Esta receta es una de esas preparaciones fáciles que te salvan en cualquier momento.
Ideal para el almuerzo, la vianda o la cena, combina vegetales, huevo y queso en una mezcla suave, sabrosa y con una textura irresistible.
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Lo mejor: se puede disfrutar tanto caliente como frío, ¡y siempre queda espectacular!
Ingredientes
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2 zucchinis medianos (rallados y escurridos)
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1 cebolla chica picada
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100 g de jamón cocido en cubitos
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100 g de queso rallado (puede ser mozzarella, provolone o el que tengas)
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3 huevos
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½ taza de harina leudante o común con una pizca de polvo para hornear
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3 cucharadas de queso crema o crema de leche
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Sal y pimienta a gusto
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Aceite o manteca para engrasar el molde
Preparación
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Preparar los vegetales. Rallá los zucchinis y escurrilos bien con las manos o un repasador limpio para quitar el exceso de agua. Esto es clave para que la mezcla quede firme y no acuosa.
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Saltear la cebolla. En una sartén con una cucharadita de aceite, cociná la cebolla hasta que esté transparente y apenas dorada. Dejala enfriar.
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Hacer la mezcla base. En un bol grande, batí los huevos junto con la crema o el queso crema. Agregá sal, pimienta y mezclá bien.
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Agregar los sólidos. Incorporá el zucchini, la cebolla salteada, el jamón, el queso rallado y, por último, la harina. Mezclá hasta obtener una preparación homogénea y algo espesa.
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Hornear. Verté la mezcla en una fuente enmantecada o con papel manteca. Nivelá la superficie con una espátula. Llevá al horno precalentado a 180 °C durante 30 a 35 minutos, hasta que esté dorado y firme al tacto.
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Enfriar y servir. Dejá entibiar unos minutos antes de cortar. Podés servirlo caliente o dejarlo enfriar por completo y guardarlo en la heladera.
Tips y consejos
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Si querés hacerlo más liviano, reemplazá el jamón por cubitos de pollo cocido o vegetales asados.
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Podés añadir hierbas frescas como perejil o albahaca para darle un aroma más intenso.
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Se conserva perfectamente en la heladera hasta por 3 días y se puede recalentar en horno o microondas.
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Acompañalo con una ensalada fresca o con una salsa ligera de yogur y limón.
Este pastel salado de zucchini es una opción versátil, nutritiva y deliciosa que se adapta a cualquier momento del día.
Cada bocado combina suavidad, sabor y ese toque casero que lo hace irresistible.