Si tus plantas tienen hojas amarillas, manchas marrones o signos de moho, puede que estés frente a un problema de hongos.
Pero antes de gastar dinero en productos comerciales, te mostramos cómo preparar un fungicida casero curativo y preventivo con ingredientes naturales, económicos y totalmente seguros para cualquier tipo de planta, incluso las más delicadas como las orquídeas.

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Qué vas a necesitar
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½ litro de agua
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1 bolsita de té de manzanilla
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Canela en polvo
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Un pulverizador
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Tijera o cuchillo limpio
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Tierra nueva (si es necesario renovar el sustrato)
Paso a paso
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Calentar el agua: colocá medio litro de agua en un recipiente apto para microondas y calentá hasta que comience a hervir (unos 3 minutos).
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Preparar la infusión: agregá la bolsita de manzanilla en el agua caliente y dejala reposar entre 8 y 12 minutos. Luego esperá a que se enfríe completamente.
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Preparar la planta: antes de aplicar el fungicida, revisá bien las hojas. Si hay hojas muy dañadas o secas, retiralas cortando desde la base. Si solo una parte está afectada, podés recortar la zona enferma sin eliminar toda la hoja.
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Revisar las raíces: si la planta está en maceta y tiene hongos persistentes, retirala con cuidado y revisá el sistema radicular. Cortá las raíces oscuras, blandas o podridas y reemplazá parte de la tierra por sustrato nuevo y limpio.
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Usar canela como barrera: espolvoreá una capa fina de canela sobre la superficie del sustrato. La canela actúa como fungicida natural y evita que las esporas vuelvan a desarrollarse.
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Aplicar la manzanilla: colocá la infusión ya fría en un pulverizador. No la diluyas con agua. Pulverizá directamente sobre las hojas (tanto el frente como el reverso) hasta que queden bien cubiertas.
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Repetir la aplicación: si la planta está afectada, aplicá cada dos días durante una semana. Cuando notes hojas nuevas y sanas, reducí la frecuencia a una vez por semana como método preventivo.
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Usar el resto del fungicida: si te sobra líquido, aprovechalo para regar la tierra de la planta. De esta forma, el efecto antifúngico también actúa sobre las raíces.
Tips y cuidados adicionales:
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No guardes el fungicida sobrante más de un día; pierde efectividad.
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Siempre aplicá el tratamiento a la sombra o en horarios sin sol directo.
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Mantené una buena ventilación en plantas de interior y evitá el exceso de riego, ya que la humedad favorece los hongos.
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Este remedio sirve para rosales, geranios, orquídeas, plantas de interior y cultivos del huerto como tomates o pimientos.
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Si las hojas siguen amarillas después de varios días, probablemente la causa sea una carencia de nutrientes y no hongos. En ese caso, reforzá el abonado.
Con este fungicida casero a base de manzanilla y canela vas a proteger tus plantas de los hongos de forma natural, económica y efectiva.
Usado regularmente, crea una barrera protectora que evita que las esporas vuelvan a aparecer y mantiene tus hojas verdes, sanas y brillantes todo el año.