Los rollitos de pollo con jamón y queso son una opción deliciosa y práctica para una comida especial o un almuerzo rápido.
Con una capa crocante y un relleno jugoso, este plato encantará a todos. Acá te mostramos cómo prepararlos paso a paso.
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Ingredientes
- 10 filetes de pechuga de pollo (aproximadamente 1-1.5 kg)
- 120 g de jamón cocido, en fetas finas
- 120 g de queso tipo Gouda o el que mas te guste, en fetas finas
- 150 g de pan rallado
- 60 g de queso rallado (Parmesano o similar)
- 2 cucharadas de aceite de oliva extra virgen
Preparación
- Preparar el empanado:
- En un bol, mezclá el pan rallado con el queso rallado. Esta mezcla será la cobertura crocante de los rollitos.
- Cubrir las pechugas:
- Untá los filetes de pechuga de pollo con aceite de oliva por ambos lados.
- Pasalos por la mezcla de pan rallado y queso, presionando suavemente para que se adhiera bien. Reservalos en un plato.
- Rellenar las pechugas:
- Colocá cada filete empanado sobre una superficie plana.
- En el centro de cada filete, poné una feta de jamón y una de queso. Si es necesario, recortá el relleno para que no sobresalga.
- Armar los rollitos:
- Enrollá cada filete desde un extremo, asegurándote de envolver bien el relleno.
- Fijá los rollitos con palillos para que mantengan su forma durante la cocción.
- Hornear los rollitos:
- Precalentá el horno a 180°C.
- Engrasá ligeramente una bandeja para horno con un poco de aceite de oliva y colocá los rollitos, dejando espacio entre ellos.
- Hornealos durante 25 minutos, revisando a los 20 minutos para evitar que se doren demasiado.
- Reposar y servir:
- Retirá los rollitos del horno y dejalos reposar unos minutos para que el queso se asiente.
- Quitá los palillos antes de servirlos y disfrutalos bien calientes.
Consejos
- Variedad en el relleno: Podés agregar hierbas frescas como albahaca o espolvorear una pizca de pimentón ahumado en el pan rallado para un toque extra de sabor.
- Opciones de guarnición: Acompañá los rollitos con puré de papas, una ensalada fresca o vegetales al vapor para un plato completo.
- Recalentado: Si sobran, guardalos en un recipiente hermético en la heladera por hasta tres días. Recalentalos en el horno para conservar su textura crocante.
¡Anímate a preparar estos rollitos de pollo con jamón y queso!
Son ideales para compartir en familia o sorprender a tus invitados con un plato casero y delicioso.