Fácil, rápida y deliciosa, esta crema de café se prepara en apenas un minuto y con solo tres ingredientes.
Tiene una textura suave y espumosa, perfecta para servir sobre leche fría o caliente, o incluso como topping para postres.

Te recomendamos: Arrollado de merengue con crema y frambuesas
Esta receta, popularizada en todo el mundo, se hizo famosa por su simpleza y sabor intenso a café.
Ingredientes
-
2 cucharadas de café instantáneo
-
2 cucharadas de azúcar
-
2 cucharadas de agua fría (también puede ser tibia)
-
Leche a gusto (fría o caliente, para servir)
-
Cacao amargo o canela (opcional, para espolvorear)
Preparación
-
En un bol mediano, colocá el café instantáneo, el azúcar y el agua. Las tres partes deben tener la misma proporción para que la mezcla monte bien.
-
Con batidora eléctrica (o a mano con un batidor de alambre, aunque lleva más tiempo), batí la mezcla durante 1 a 2 minutos, hasta que se vuelva espesa, cremosa y de color más claro.
-
Probá la textura: debe formar picos suaves, como un merengue liviano. Si querés que quede más firme, batí unos segundos más.
-
Serví la leche en un vaso (puede ser fría o caliente) y colocá encima una o dos cucharadas grandes de la crema batida.
-
Espolvoreá con cacao, canela o un poco de café molido para decorar.
Tips y consejos:
-
Usá café instantáneo fuerte o tipo espresso para un sabor más intenso.
-
Si preferís menos dulzor, reducí la cantidad de azúcar a gusto.
-
Podés guardar la crema en la heladera por 1 o 2 días dentro de un recipiente tapado.
-
Para una versión más golosa, agregá una cucharada de dulce de leche o de crema de avellanas a la mezcla antes de servir.
-
También podés usar la crema sobre helado de vainilla o bizcochuelos como decoración.
Con solo tres ingredientes y un minuto de batido, esta crema de café logra una textura aterciopelada que transforma cualquier taza de leche en una bebida especial, digna de cafetería.