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Cómo hacer Pan casero nunca fue tan fácil… ¡Y sin horno!

El pan casero no siempre requiere amasar durante horas ni prender el horno.

Con esta receta rápida vas a preparar un pan esponjoso, dorado y delicioso directamente en una sartén.

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Ideal para quienes buscan practicidad, pero sin resignar el sabor de un pan recién hecho.

Ingredientes

  • 2 huevos

  • 200 ml de leche

  • 3 cucharadas de aceite

  • 250 g de harina leudante (o harina común + 1 sobre de polvo de hornear)

  • 1 cucharadita de sal

  • 1 cucharadita de azúcar

Preparación

  1. En un bowl, batir los huevos junto con la leche, el aceite, la sal y el azúcar hasta que todo quede integrado.

  2. Añadir la harina tamizada poco a poco, mezclando con batidor de mano o cuchara hasta obtener una masa líquida pero espesa, sin grumos.

  3. Calentar una sartén antiadherente a fuego bajo y engrasarla con unas gotas de aceite.

  4. Verter la masa en la sartén, extendiéndola en forma de círculo grueso.

  5. Tapar la sartén y cocinar lentamente durante 10 a 12 minutos, hasta que la parte inferior esté dorada y la superficie casi firme.

  6. Con ayuda de una espátula ancha, dar vuelta el pan y cocinar del otro lado durante 5 a 7 minutos más, siempre tapado.

  7. Una vez dorado por ambos lados, retirar de la sartén y dejar enfriar unos minutos antes de cortar en porciones.

Consejos:

  • Cocinar a fuego bajo es fundamental para que el pan no se queme por fuera y quede crudo por dentro.

  • Usar sartén con tapa ayuda a mantener la humedad y hace que el pan se infle mejor.

  • Si querés un sabor más intenso, agregá hierbas secas, queso rallado o semillas a la masa.

  • Podés dividir la masa en porciones más pequeñas para hacer panes individuales.

  • Reemplazá la leche por yogur natural para lograr un pan más tierno y húmedo.

  • Para un toque dulce, añadí 2 cucharadas de miel o azúcar extra y usalo como bizcocho.

  • Este pan es ideal para comer tibio, acompañado con manteca o relleno con jamón y queso.

  • Si lo querés más aireado, batí las claras a nieve antes de incorporarlas a la mezcla.

  • Guardalo en una bolsa de tela o recipiente hermético para que no se seque.

  • Se puede congelar cortado en porciones y calentarlo en sartén o tostadora antes de comer.

Con este método, tu pan casero quedará esponjoso, dorado y listo en pocos minutos, sin horno y sin complicaciones.

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